lunes, 18 de abril de 2011

Al César lo que es del César

Al César lo que es del César



El partido ante Colo Colo tuvo de dulce y agraz.  Dulce, por que demostramos que tenemos el mejor equipo del torneo en cuanto a plantel y juego se refiere; agraz, por que terminamos empatando un partido que debió ser nuestro ante el colo colo más malo de todos los tiempos. Nos empatamos solos.


Leí muchas críticas al planteamiento del equipo, a la formación, a los cambios, a la actitud, a los “huevos”, a la pachamama y las formaciones planetarias incluso ANTES de que este comenzara. ¿Por qué? Se que todos tenemos un “DT interno” y que siempre pensamos que nuestras decisiones hubiesen sido las mejores, pero… ¿será tan así? En el fútbol, las cosas hay que medirlas con una vara acorde al contexto y a la coyuntura. Los hinchismos no sirven.


El partido pudimos (y merecimos) ganarlo sin problemas, pero nos complicamos solos. Daba gusto ver al “popular” corriendo tras la pelota, viendo como transitábamos por toda la cancha tocando una y otra vez, sin poder salir de su terreno ni, menos, hilvanar jugadas de ataque. Tuvimos el control de la pelota el 90% del tiempo, pero nos faltaba la última estocada, esa que estuvo en los pies de Villanueva, en los del gato Silva, en los de Costa. Quizás, y sólo quizás, si ayer nos hubiésemos atrevido a patear al arco más seguido y jugar de manera un poco menos vistosa, pudimos encajar uno que otro golcito más…  


El trámite no varió –ni siquiera con la mínima ventaja que teníamos - en el 2do tiempo, aunque claramente el equipo se vio más timorato, saltándose el mediocampo y tratando de aprovechar los pelotazos. La defensa de católica estuvo sólida, ganando los “mano a mano” e hilvanando jugadas de ataque que salían desde el fondo. El mediocampo hizo un gran trabajo desde el punto de vista técnico y táctico, con un Costa “On Fire” y un Gato Silva con hambre, volviendo a su habitual nivel, ese que había desaparecido por un par de partidos. Meneses aportó con su vértigo de siempre y Sepúlveda quizás no lució, pero hizo un correcto trabajo en el medioterreno. En la delantera se hizo un gran trabajo, sobretodo en lo táctico, pero nos faltó matar cuando pudimos. Quizás ese fue el pecado.


Ahora, como dije anteriormente, hay que poner las cosas en su contexto. Jugamos en la ruca, de visita y ante el “arvo campión” y nos sacaron un empate muriéndose sólo por un rebote fortuito que llegó a los pies de Lady Miralles. Pese a que no ganamos, y a que para nosotros ganar en el monumental ya sea una sana costumbre, los humillamos con personalidad y buen toque, los hicimos correr tras la pelota como unos quinceañeros y demostramos el equipazo que somos.  Nosotros nos fuimos mordiendo la rabia, mientras ellos quedaron conformes celebrando un empate en su casa ¿Quién tiene la actitud de un campeón y quién la de un ratón?


Claro, en el campeón del bicentenario no hay espacio para conformismos, pero no se confunda. Una cosa conformarse con el resultado (que no es el caso) y otra muy distinta tratar de destacar lo bueno que tuvimos ayer y que, obviamente, no aparece en ningún diario nacional (¿por que será? ¿Ah?). Hay que rescatar que sumamos un punto y no dejamos que ellos se acercaran a la zona de play Off’s, lo cual implica tenerlos con el poto a cuatro manos de acá hasta que termine la fase regular. Por otro lado, la contra quería que perdiéramos para acercarse a nosotros, pero no les dimos esa alegría… ¿Qué mejor? sigan mirándonos desde abajo… es mejor que se acostumbren.


Éramos 3.000 en el estadio, pero siempre nos escuchamos más que ellos (y sin parlantes). Éramos 11 contra 12 en cancha, sin embargo sólo nos empataron por un cuevazo y por que los dejaron pegar todo el partido a diestra y siniestra… recordé un capítulo de “Barrabases” titulado “Tarjeta Roja”… 
definitivamente a Polic se le quedaron las tarjetas en el camarín.

Insisto: no ganamos. Los triunfos morales no sirven para ganar campeonatos, pero queda la tranquilidad de que fuimos superiores. Nada ni nadie debería dejar que esos 15  puntos que nos quedan hasta el final de la fase regular se nos escapen, por que podemos descansar en nuestros jugadores y cuerpo técnico. Pizzi –al menos la versión de él que he visto en SM y la UC - no es 100% de mi gusto como DT y nunca lo he negado, pero decir que el equipo gana porque “se lo arma la galería” y pierde porque “lo arma Pizzi” me parece un exabrupto de proporciones. Al César lo que es del César. Estamos donde estamos en gran medida por su trabajo y el del plantel. No seamos más papistas que el papa.


Hijo: Ni en tu ruca puedes ganarle a Papá! Somos tan distintos, indio! Tan distintos!

Grande Católica CTM!


Imágenes: lacatolica.cl

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3 comentarios:

  1. Excelente, una de las columnas más sensatas que he leído. Nadie habla de como se ha afirmado la defensa de la UC luego de ese traumático partido con Caracas, los periodistas se cansaron de decir que nuestra defensa era un fiasco.....ahora que responde nadie lo comenta.
    Saludos

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  2. Excelente. Lo último CC al de lacolumnaderazta y unos tantos que twittean en la comunidad de #LosCruzados.

    Aguante la UC y a dar el aguante en las buenas y en las malas loco!!

    Ricardo

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  3. Muy buena columna. Acertiva, representativa, medida y racional. "Al Cesar lo que es del Cesar", y que se calle de una vez el "no sé que mierda se cree" Razta, "columnista oficial", q es un payaso.

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