Para un hincha de cualquier equipo recordar fechas está relacionado con triunfos, con campeonatos, con vueltas, con uno que otro hito histórico. Para el hincha de la UC no es muy distinto: recordamos con cariño la maravillosa temporada de 1993 que nos llevó a la final de la prestigiosa Copa Libertadores de América; recordamos lo realizado los años 94-95 que nos dejó jornadas inolvidables; recordamos a ídolos como Beto Acosta, Gorosito, Lunari, entre muchos otros; y también recordamos fervientemente cada 20 de julio.
Justamente en esta fecha, y ya hace veloces 15 años, Raimundo “Mumo” Tupper, un jugador de 27 años tomaba una de las decisiones que más apelativos puede tener: “que es el cobarde más valiente”, “que es una torpeza”, “que es el fin a tantos problemas”, en fin. Ningún apelativo es tan cierto como el recuerdo que aún permanece en la mente de todos y cada uno de los que llevamos a éste equipo en el alma. Y es que el cariño que sentía por los colores que vestía, sus desbordes por la banda izquierda, sus centros precisos, su sensatez a la hora de hablar con la prensa, nos recuerda a un hombre que en vida era muy valioso, y que hoy lo es mucho más.
Al “Mumo” lo vemos todos los domingos que juega nuestro amado equipo en San Carlos, la cruz que lo recuerda mira atento cada uno de los partidos que disputa la franja. Al “Mumo” no lo recordamos sólo cuando se cumple un año más de su partida. El “Mumo” está presente en cada encuentro, en cada canción que canta la hinchada apoyando al equipo, en cada desborde por las bandas, en cada jugador que viste su camiseta con el número 7. “Mumo” está presente en el Nacional, en el Monumental, y cómo no: en su casa, San Carlos.
Por todas estas cosas, es que ser hincha de la UC es no tan sólo llevar el recuerdo de nuestras glorias y/o de nuestros fracasos. Ser hincha de la UC va más allá, va en recordar cómo nos afectó la muerte de éste ser tan querido, va en recordar su funeral con un estadio prácticamente lleno, va en recordar constantemente que tenemos una estrella que mira atento cada uno de los movimientos relacionados con el club que tanto quiso, va en recordar con cariño y respeto al gran Raimundo Tupper.
EXECELENTE,GRANDE MUMO!
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